La Crítica Destructiva

De la forma en que emitamos nuestras críticas, verdades o hagamos nuestros reclamos, depende muchas veces, la felicidad o la desgracia, la paz o la guerra.

Cuando una persona se queja o hace un reclamo está señalando algo que quiere o necesita del otro.

Pero cuando se critica constantemente con hostilidad, se llega al irrespeto y esto provoca una herida profunda en la persona.

Cuando se critica al otro por algo que hace, se puede pensar que el otro puede modificar su conducta y llegar a una solución. Pero, cuando se critica por lo que es, se le está atacando en su esencia. Haga lo que haga, se le considera incapaz, poco fiable, etcétera. Cuando hay hostilidad, sarcasmos o insultos; y cuando se desvaloriza, desprecia y humilla, se irrespeta al otro como persona, consiguiendo solamente que se deteriore aún más la comunicación y por ende la relación.

No cabe duda que la verdad debe ser dicha en cualquier situación, mas la forma en que es comunicada es lo que provoca en algunos casos, grandes problemas. La verdad puede compararse con una piedra preciosa. Si la lanzamos contra el rostro de alguien, puede herir, pero si la envolvemos en un delicado embalaje y la ofrecemos con ternura, ciertamente será aceptada con agrado.

Feliz Domingo.